PROFESIÓN: ENÓLOGO.
Tenemos el placer de charlar con Elías López Montero…
P. ¿Desde cuando te dedicas a esto?
R. Desde hace 20 años , aunque ya van más de 35 vendimias contando el trabajo en el hemisferio sur.
P. ¿Cuándo sentiste la necesidad de dedicarte a esto?
R. En una vendimia en Sudáfrica sentí que esto era a lo que me quería dedicar . Se respira un ambiente especial en ese país.
P. ¿Qué es lo que más te agrada de tu trabajo?
R. Lo que más me agrada es la época de vendimia y el periodo de fermentación, es la mejor etapa pero, por supuesto, tener la responsabilidad de conducir los vinos de la familia es algo muy, muy grande. Me encanta el poder aportar una visión distinta de los vinos de mi tierra …. Y hacer de ello nuestro sello personal!.
P. Si tuvieras que definir tu trabajo en una sola palabra, ¿cuál sería?
R. Te doy 3: Compromiso , creatividad y pasión… y no siempre por ese orden!!!
P. Un consejo al que empieza
R. Viaja, prueba mucho, asimila los conceptos, haz amigos en el vino, aprende y sé generoso.
P. ¿Talento o trabajo?
R. Traba, sin duda. El talento, en este gremio, tiene que ver con la capacidad de desenvolverte en él de una manera concreta que sea adecuada para el entorno en el que trabajas y para ti mismo.
P. Una frase o cita.
R. “Fui piedra, perdí mi centro y me arrojaron al mar… las circunstancias y el tiempo me volvieron a sacar“. Es una frase que decía mi madre, también tomaron algunos artistas del flamenco, que viene muy bien cuando vienen mal dadas. Además está escrita en la etiqueta del vino María Victoria, que elaboro en La Patagonia Argentina.
P. Un cocinero.
R. Buff qué difícil!!! No puedo quedarme sólo con uno… Imposible!! Pero disfruté mucho cuando nos conocimos con la cocina de Pedro Martino. Y ahora mismo en Castilla La Mancha hay mucho también donde mirar.
P. Un plato.
R. Pichón estofado.
P. Un ingrediente o producto imprescindible en tu cocina.
R. Aceite de oliva.
P. Un vino.
R. Estamos en las mismas, no me puedo quedar con un vino cato mucho a lo largo del año y hay muchos vinos de compañeros que me emocionan… pero diré que Noemía 2016 de Hans Vinding, es un vino que me emocionó mucho en una cata que recuerdo muy bien.
P. Un restaurante.
R. Kikunoi, en Kyoto … tengo ganas de volver a Japón y echo de menos sus sabores y detalles.
P. Una ciudad para vivir.
R. Tokyo, sería mi ciudad fetiche aunque siempre fui de visita… Madrid es la que más he vivido y en la que siempre me quedo con ganas de más.
P. Un sueño por cumplir.
R. Vivir más tranquilo… pero todavía no!! Jaja.
P. ¿Algún proyecto para este año?
R. La nueva bodega de Verum en Tomelloso… eso también es un sueño, que parece que por fin, empieza a tomar forma!
¡Buen viaje entonces!
R: Gracias!